Contar historias a través del transmedia en #EBE13
Una de las principales bazas de un evento como EBE (Evento Blog) es la posibilidad de ponerte en contacto con profesionales interesantes que tienen algo nuevo que contar, oigan esto no es baladí. Si para eso tenemos darnos una vuelta por Sevilla, pues nos vamos. Ver galería de fotos de Albilés Comunicación.
Nicolás Alcalá, director de El Cosmonauta, estrenada en mayo de 2013, reconocía en la edición de este año, que a pesar de haber creado todo un universo transmedia que envolvía a su producción, aún no estaba seguro de poder explicar con claridad “qué es eso del transmedia”. Y razón no le faltaba, porque yo me pregunto qué diferencia hay con las grandes campañas de merchandising y marketingque las marcas, productoras llevan realizando tiempo atrás, es decir, productos franquiciados, secuelas, adaptaciones…
Investigando y curioseando, parece ser que la cuestión radica en que el hilo narrativo, ya apareció elstorytelling, no se desarrolla en un único elemento, sino que se despliega a través de diferentes piezas que adoptan multitud de canales y soportes. “Si visionas mi película sentirás que faltan partes de la historia que no te he contado, para ello deberías de ver por ejemplo los 38 cortos que realicé”.Pulsa aquí para verlos.
Otro aspecto diferencial del transmedia, es buscar la participación del usuario, borrar la línea que separa al productor del espectador. Ello va a requerir generar contenido que ‘enganche’ al público utilizando técnicas que logren formar parte de su vida diaria. Las piezas de contenido suelen estar abiertas, por aquello de sentir que falta algo, pero simultáneamente ligadas entre sí y que exista una sincronía narrativa entre ellas. Como ejemplo, me parece genial la iniciativa de El Cosmonauta de “Live Experience” en la que cualquiera de nosotros podemos solicitar que nos monten una proyección o bien colaborar en la organización en nuestra ciudad, universidad…
Sigamos con algo más de historia. Esto que es tan novedoso tiene sus orígenes en los años 70 y 80, cuando ya había artistas muy vinculados a las Tecnologías de la Información que comenzaban a realizar sus primeros experimentos sobre la narración colectiva. Con la normalización del uso de internet en los 90, estas primeras iniciativas impulsaron que numerosos creadores comenzaron a explorar maneras de contar historias que entretuvieran al público utilizando nuevas plataformas.
Tras contactar en un festival internacional con el equipo de La Bruja de Blair, proyecto considerado transmedia, Adrián contaba cómo comenzó a pensar en su proyecto bajo este nuevo concepto. Y lo consiguió, hace unos meses que estrenó su película rodada en más de 150 localizaciones y que cuenta además, para los “enganchados” a su historia, productores también a través de su participación en el crowdfunding, con 38 cortos y si obtienes tu K-Pass, accedes a 37 webisodios, 56 escenas detrás de las cámaras, newslsetter y libro.
Éste es un ejemplo del transmedia en el cine, pero ¿y las marcas?, ¿qué están haciendo ya? Aquí tienes algunos ejemplos como el de Knorr en Canadá que creó varios episodios del personaje animado de la campaña, Salty, Piratas del Caribe llevado al mundo terrenal con la ambientación en un conocido parque de atracciones o proyectos solidarios como el de Ahora te toca a ti donde niños de Birmania participaron en la creatividad de una app que servirá para ayudarles.
Y barriendo para casa y como guinda de este post, en Albilés Comunicación por el momento tenemos una A, un cómic que cuenta su origen lunático, un boletín que sale junto a los hombres lobos con la luna llena, decálogo de albileadores/as y muchas más sorpresas que aún no podemos desvelar… ¿transmedia o no? Evalúen 😉