Un día como hoy hace 67 años el diseñador de moda francés, Louis Reard, presentaba el “bikini”, un atrevido bañador de dos piezas. Se bautizaba así a esta prenda porque en aquellos momentos EE.UU. estaba realizando pruebas nucleares en las islas Bikini, un atolón del Océano Pacífico.  No resulta sorprendente que en España e Italia se prohibiera su uso durante mucho tiempo.

Hoy, como “los viernes son de cine” en nuestro blog, os traemos cómo el bañador ha sido llevado a la gran pantalla, con su consiguiente revuelo entre el público, especialmente el masculino.

Nadie puede pensar en bikini sin que se le venga a la cabeza la imagen de Brigitte Bardot, en Dios creó a la mujer en la película dirigida por Roger Vadim en 1956. También esta pieza, se convertiría en traje oficial de las chicas Bond. Así lo vimos con Úrsula Andress en 007 contra el Dr. No, emergiendo del agua con un bikini blanco que ella misma ayudó a diseñar y un cuchillo al cinto. Años después y como homenaje a ésta, Hall Berry volvería a repetir esta escena en Muere otro día.

Si hablamos de polémica, no podemos dejar de lado a Stanley Kubrick y a su Lolita. Corría el año 1962. En el film, una jovencísima Sue Lyon, interpretaba a una  chica de 14 años que despertaba las más bajas pasiones de James Mason (su padrastro), mientras tomada el sol en el jardín, efectivamente, con un bikini muy tentador.

A modo de cierre y reflexión, ¿de qué forma puede tu comunicación tentar al público al que te quieres dirigir? ¿Será con la transgresión?, o más bien ¿con la sutileza y la insinuación?, ¡encuentra tu fórmula! Combinación de narrativa y apoyo visual para despertar emociones…

Sí, también hay escenas muy sugerentes para los más fieles seguidores de Stark Wars,  como la escena que protagonizó Carrie Fisher en El retorno del Jedi ante su captor Jabba.

Os dejamos con varias escenas para abrir boca.